Innocence Project ha obtenido un nuevo triunfo en el camino por demostrar la inocencia de Thomas Arthur. La suprema Corte de Alabama, por 5 votos contra 4, ha impedido que la inyección letal se aplique el pasado 31 de julio.
Sangre pelo y semen recogidos como evidencia, jamás fueron sometidos a pruebas de ADN para cotejarlos con el material genético de Thomas, quien es acusado de un asesinato que jamás cometió, y permanece hace 25 años privado de libertad, denegándosele sistemáticamente la posibilidad de hacer las pruebas de ADN.
En 1982, Troy Wicker fue asesinado. Su esposa Judy fue condenada a cadena perpetua, y en 1991, se le otorgó la libertad condicional luego de testificar en un juicio contra Thomas. Puedes leer la historia aquí.
Para visitar la página web de Thomas, haz click aquí.
Puedes firmar la petición contra su ejecución en esta página.
Todo lo que piden los defensores de Arthur, es que se hagan de una vez los examenes de material genético. ¿Sería mucho pedir, señor Gobernador Bob Riley?
Thomas tiene hoy 65 años de edad, no luce como en la foto superior derecha del post.
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