Nada menos que 10 años han tardado don periodistas alemanes para llegar a la conclusión definitiva que Vincente Van Gogh no se cortó su oreja, sino que el autor de la lesión fue el pintor Paul Gauguin, quien lo atacó con una espada, a la salida de un burdel, en Arles.
Hans Kaufmann y Rita Wildegans, autores del libro "En la oreja de Van Gogh: Paul Gauguin y el pacto del silencio" llegan a la conclusión, después de examinar los testimonios y descubrir variadas inconsistencias. El asunto habrís sido ocultado por el bueno de Vincent, para proteger a su agresor de los policías.
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