En el ámbito penal, nos movemos en un mundo donde la verdad no siempre está al alcance de la mano, sino que muchas veces huye, se disfraza o simplemente no existe. Hace unos años vi Primal Fear, traducida como La Raíz del Miedo, y en España Las Dos Caras de la Verdad. Me la recomendó un abogado que me llevaba varios años de profesión por delante, cuya simpatía por la prensa era equivalente a la de los conejos por las escopetas. Pero no fue el abogado Martin Vail protagonizado por Richard Gere, el que me llamó la atención, sino el personaje de Aaron Stampler, dibujado genialmente por Edward Norton, quien se lleva las palmas como el chico bueno acusado del crimen del arzobispo Rushman.
¿Cómo enfrentar a un cliente que alega inocencia? Siempre enseñamos que en la primera entrevista no debemos hacernos expectativas de obtener un trazo de verdad; que la confianza es un proceso lento; que debemos huir del testing ground, etc. Todo eso está plasmado en esta cinta, que debiera ser vista por todo aquel que desea convertirse en abogado criminalista.
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