Diane Lane interpreta a Jenifer Marsh, la agente especial de la brigada del cibercrimen del FBI, a la caza de un asesino serial que secuestra a sus víctimas, y las exhibe en internet, torturándolas hasta darles muerte, en directa progresión con las visitas que recibe el sitio. Por supuesto, la película dirigida por John Hoblit, no será candidata al oscar, pero para los criminalistas tiene particular interés en cuanto muestra el trabajo y recursos de una especialidad que tiene por misión resguardar la seguridad de las personas en el ciberespacio.
Hay escenas de hackeo; persecuciones virtuales a través de rastreos de IPs, robos de claves y detenciones de cibertransgresores. No esperen una gran trama ni escenas para la posteridad, sólo disfruten viendo la recreación de un grupo de detectives especializados en el cibercrimen, y tomen nota de la cantidad de recursos tecnológicos que se emplean para detectar infracciones en el mundo virtual. La próxima vez que enciendan el computador, no olviden que alguien les puede estar mirando desde el otro lado. En suma, algo de docencia geek, que no está de más por si es necesario ver un caso de delitos relacionados con la computación.
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