La campaña presidencial que enfrenta al republicano John McCain y al demócrata Barack Obama, comienza a girar hacia"temas valóricos", como la pena de muerte. Todo comenzó con la decisión de la Corte Suprema norteamericana, que por 5 votos contra 4, no aplicó la pena capital a un hombre acusado de violar a su hijastra. El voto de mayoría estimó que es sólo procedente en los delitos con resultado de muerte. Según ABC, los 5 de mayoría son demócratas y los 4 restantes, republicanos.
En una calculada jugada política, Obama se mostró partidario de la pena de muerte en el caso de abuso de menores y ambos candidatos repudiaron la decisión que redactada por el Juez Kennedy en parte dice:
El recurso a la pena de muerte debe reservarse a los peores de los crímenes y limitado en su aplicación. En la mayoría de los casos, la justicia no se logra mejor poniendo fin a la vida del culpable sino encerrándolo y preservando la posibilidad de que él y el sistema le permitan comprender la enormidad de su crimen.
En Estados Unidos, 37 estados permiten la aplicación de la pena capital.
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